El acto fue precedido por el señor Juan Ubaldo, quien actualmente ocupa el cargo de Gran Maestro o presidente electo de las logias de la Federación |
Los Masones venezolanos celebraron una gran tenida blanca en el Gran Templo Masónico de Caracas durante la mañana del 16 de Julio de 2016. El motivo de la reunión masónica fue la conmemoración del bicentenario de la muerte de Francisco de Miranda.
Las tenidas blancas son reuniones masónicas donde se permite entrar al templo a las damas. Las cuales no son admitidas en la masonería, al menos a las logias afiliadas a la confederación masónica dentro de la cual, la masonería venezolana es reconocida en su condición de potencia masónica nacional.
El Gran Templo Masónico de Caracas, Monumento Histórico Nacional, gracias a las gestiones jurídicas de un ilustre jurista y reconocido masón venezolano, el doctor Miguel Eduardo Santana Mujica y el historiador Armando Rojas hace algunas décadas. El Gran Templo está ubicado entre las esquinas de Jesuitas y Maturín, a poco más de dos cuadras de la Plaza Bolívar. Se le conoce como Gran Templo porque es sede del poder ejecutivo de la masonería nacional, cada cierto tiempo que estipula el reglamento, se reúnen los diputados de las logias de la provincia, y las demás logias que celebran sus tenidas regulares en diferentes cámaras que se encuentran dispersas en los diferentes alas que componen este extraordinario diseño del arquitecto Juan Hurtado Manrique. Para la fecha cuando fue inaugurado el Templo Masónico de Caracas, en 1876. La fachada del monumento ostentaba, en lugar de las estatuas de Francisco de Miranda y Antonio Guzmán Blanco, estaban ocupados sus nichos por las estatuas de dos damas emblemáticas de la Masonería que representan a la Fuerza y a la Belleza.
¿Por qué y cuándo ese cambio en la fachada de la sede sagrada de la espiritualidad masónica? ¿Porqué sacaron a las estatuas de dos damas que representan a la fuerza y a la belleza de ambos lados de las columnas salomónicas que representan a la Sabiduría en la fachada del templo.
¿Porqué las expulsaron para meter a dos personajes como tan opuestos o disímiles como uno apodado El Autócrata Civilizador y al otro reconocido por la historia oficial como El Precursor de la Independencia de América. Este último, que de paso, nunca había sido, ni siquiera recordado, ni por los masones del Siglo XIX, ni por los del siglo XX, hasta el año de 1950, cuando el doctor José
Tomás Uzátegui, quien para esa fecha ocupaba el cargo de Gran Maestro, se le ocurrió la idea de reconocer a Miranda como hermano masón. Además de esa ocurrencia, se le ocurrió mandar a buscar los documentos que vinculan a Miranda con la Masonería. Han transcurrido más de sesenta y seis años, y los tales documentos no fueron encontrados, ni por el profesor William Spence Robertson, quien venía había hecho su tesis doctoral en 1907, sobre la vida de ese ilustre caraqueño, admirado en los Estados Unidos por sus inmensas dotes intelectuales, y amplio conocimiento de la historia militar.
La Masonería Mirandiana Rinde Homenaje a Su Héroe prototipo Masón |
Tomás Uzátegui, quien para esa fecha ocupaba el cargo de Gran Maestro, se le ocurrió la idea de reconocer a Miranda como hermano masón. Además de esa ocurrencia, se le ocurrió mandar a buscar los documentos que vinculan a Miranda con la Masonería. Han transcurrido más de sesenta y seis años, y los tales documentos no fueron encontrados, ni por el profesor William Spence Robertson, quien venía había hecho su tesis doctoral en 1907, sobre la vida de ese ilustre caraqueño, admirado en los Estados Unidos por sus inmensas dotes intelectuales, y amplio conocimiento de la historia militar.
A Partir de esa fecha la Masonería Venezolana ha venido colocando bustos de Miranda en diferentes espacios públicos a lo largo y ancho de Venezuela. Ha fundado logias con el nombre de Miranda y a creído con fé religiosa, el dogma principal de la Masonería Mirandina.
Uno de los hechos que llamó la atención del acto en honor a Francisco de Miranda, fue que al autor del del ensayo literario, es que no leyó el trabajo ganador. Ni siquiera le otorgaron el derecho de palabra.
Uno de los hechos que llamó la atención del acto en honor a Francisco de Miranda, fue que al autor del del ensayo literario, es que no leyó el trabajo ganador. Ni siquiera le otorgaron el derecho de palabra.